Estos días Twitter está mostrando a los usuarios de forma escalonada un nuevo diseño. No es demasiado radical este cambio, pero sí lo suficientemente notorio como para identificar que algo está siendo diferente.
Este rediseño afecta en primera instancia a los botones generales de la pantalla de inicio. Se puede detectar un alejamiento de las rectas en los botones de seguir, las fotos de perfil y una pronunciación más fina en los botones de interacción con las publicaciones.
A la hora de publicar un tweet, toda la caja de texto ha sido redondeada y los iconos de contenido multimedia se asemejan a dibujos infantiles, estilo que también se ha aplicado en los botones superiores de Inicio, además de que comparten un diseño de líneas más finas.
Este rediseño afecta también a la usabilidad (que siempre van unidos), más directamente en los resultados de búsqueda. Igual que hiciera Facebook, Twitter apuesta ahora también por las pestañas de categorías, diferenciando con ello cada vez más contenido, desde Personas hasta Noticias, Transmisiones, etc.
¿Para qué sirve promocionalmente un rediseño?
Como decimos, la usabilidad ha sido modificada, pero no solo en el aspecto que hemos comentado. También afecta a la propia usabilidad del interfaz para el usuario, principalmente cuando abre Twitter desde teléfonos móviles, donde el diseño, desde el exterior del smartphone hasta el interior de las apps, se aleja de las figuras rectilíneas.
Por descontado estamos ante una tendencia, pero debemos continuarla. La adecuación del diseño de un interfaz a los gustos de los usuarios actuales, demuestra una actualización constante de los responsables de la empresa, en este caso de Twitter.
Se evita además con ello que otras empresas del sector presenten un sistema funcional muy similar al nuestro, pero con un diseño más actualizado. Esto ha pasado en muchas redes sociales, en las que la falta de adecuación a los nuevos tiempos ha llamado al olvido a algunas iniciativas, a favor de otras simplemente más modernas visualmente, aunque ofrecieran exactamente lo mismo.
Pero sobre todo, el efecto de un rediseño más interesante es el renovado interés de usuarios que, o bien habían dejado un poco de lado la red social, o bien se quiere reforzar su uso con un mayor atractivo visual.
Obviamente no hay un rediseño que guste a todo el mundo. Del mismo modo que se ganan seguidores o usuarios, también se perderán por otro sentido, en la figura de aquellos que no lo aceptan o que les desagrada. Quizás en el siguiente rediseño regresen.