Los responsables de marketing tienen muchas tareas que desarrollar. Esto les limita notablemente al tener que dedicar una gran cantidad de tiempo en publicaciones, interacciones, dinamización en redes sociales…

Hacer esto de forma manual significa invertir mucho tiempo de la jornada diaria, por eso muchos profesionales escogen la opción de la automatización de estas tareas. Planteamos en este artículo la siguiente cuestión: ¿Es recomendable el automatismo?

Cómo realizar publicaciones automáticas

Hay dos principales formas de realizar publicaciones automáticas. La primera de ellas y la más utilizada es mediante plataformas externas, que incorporan en su propio sistema los diferentes entornos online en los que permiten realizar estas programaciones de contenido promocional.

La otra forma es directamente en cada entorno. Sobre todo las redes sociales se han dado cuenta de la necesidad de estas estrategias promocionales, por lo que facilitan a los usuarios la posibilidad de realizar directamente las publicaciones programadas en ellas, para no depender de otras plataformas.

Cada una de ellas tiene sus ventajas e inconvenientes. Por un lado, las plataformas externas permiten un automatismo más rápido y organizado sobre diferentes entornos digitales. Sin embargo, al no ser desarrollos propios, dependen directamente de ellos, así que no garantizan una eficacia del 100%.

Por otro lado, los entornos digitales son totalmente fiables sobre sus propios sistemas, pero no suponen un ahorro de tiempo importante, dado que el profesional del marketing tiene que programar cada uno de los mensajes.

¿Es recomendable el automatismo de publicaciones?

El automatismo comentado persigue un principal objetivo, el ahorro de tiempo del profesional. En la mayoría de los casos lo consigue, sin embargo tiene consecuencias secundarias que hay que tener en cuenta.

Uno de estos objetivos consecuentes es la búsqueda de una mayor rentabilidad por el trabajo realizado. Con el ahorro de tiempo, se invierte el tiempo excedente en otras tareas y, por tanto, se mejora la rentabilidad.

Sin embargo, el automatismo tiene sus riesgos. El principal es no poder adecuar bien el lenguaje a cada entorno, lo que significaría desaprovechar una interacción más eficiente con nuestros seguidores y usuarios potenciales.

También tiene desventajas directas. El automatismo impide adecuar el contenido a la actualidad imperante. Por tanto, salvo que sean tendencias fáciles de anticipar, como una festividad o un evento político, económico o cultural importante, no se puede adivinar con el sistema automático estos mensajes. En consecuencia, no podremos aprovechar estas opciones si nos limitamos solo a automatizar el contenido promocional.

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